Considerando que la colonización de Rapa Nui se origina en Polinesia suroriental, las condiciones del océano y la distancia más corta sugieren a Mangareva y el Grupo Pitcairn como el probable origen de la población. Por consiguiente, el determinar la secuencia cronológica, los patrones de asentamiento y relaciones inter-islas de éstos grupos de islas, localizadas a unos 1600 km, sitúa en un contexto más amplio a la prehistoria de Rapa Nui.

Entre 1990-1992 el autor desarrolló un proyecto multi-disciplinario en el Grupo de Pitcairn centrado en la colonización, los modelos de asentamiento, el cambio medioambiental, los efectos de la predación humana en la fauna terrestre y marina, y la sustentabilidad de islas ecológicamente-marginales. A este estudio en Pitcairn se suman estudios geológicos y arqueológicos en Mangareva. Las evidencias de traslado de materiales pétreos para la confección de azuelas (basalto), vídrio volcánico (obsidiana) y de piedras usadas en los curantos fueron bien documentadas mediante estudios geoquímicos; además también fueron identificados diversos cultivos y la madre-perla, como importantes artículos de intercambio en la esfera de interacción Mangareva-Pitcairn.

La situación cronológica del proceso de colonización, la subsecuente diversificación y la extinción de diversas especies debido al impacto de la actividad humana, incide en la comprensión de la secuencia de estos procesos en las islas en general, y de Rapa Nui en particular.